«Si no vives para servir, no sirves para vivir»
es el lema de los blogs de Julio Carmona
(editados con la colaboración de Juan Víctor Alfaro):
http://www.vosquedepalabrasvives.blogspot.com/
http://www.mesterdeobreria.blogspot.com/

De nobel pasó a ser noble
quien quiso ser presidente,
pero por partida doble
perdió todo don de gente.

Estimados colegas de la Sociedad Argentina de Escritores:

De mi consideración:

Elevo a Uds. mi renuncia al cargo de vocal de la Comisión Directiva de esa institución, con que se me honró en su oportunidad.

Motiva la misma, mi total discrepancia con la convocatoria del reciente Premio Nobel de Literatura Sr.Vargas Llosa a presidir la apertura de la Feria del Libro del corriente año.

Enterado de que su convocatoria ha sido efectuada por la Fundación El Libro, y habiendo consultado la conformación de las autoridades de la misma, he comprobado ahí la presencia de varios miembros importantes de las Autoridades de la Sade, que gozan todos de mi respeto y varios de mi sincera amistad.

Pero hay algo en mi alma, y mucho en mi memoria que me hace rechazar con repugnancia la convocatoria de Vargas Llosa, a quien creo dueño de un estilo y una obra artísticamente cautivante, pero sirviente de una ideología que le hizo mucho mal al país prohijando e imponiendo sus devastadoras políticas socioeconómicas durante el trágico período dictatorial, en el lapso 1976-1984, y su continuación hasta el 2001.

Vargas Llosa no respeta ni quiere a la Argentina ni a los argentinos. Son numerosas las circunstancias en que se ha expresado no sólo con desconocimiento de nuestra realidad, sino con odio y desprecio, sobre nuestro pueblo y sus esfuerzos para emerger del pozo en que nos hundió el liberalismo salvaje que él pregona, impuesto a través del crimen de 30.000 desaparecidos, y el sometimiento de todo el país a las circunstancias de ilegalidad, terror, y miseria, mediante un plan sistemático de exterminio aplicado en toda Latinoamérica instrumentando el conocido Plan Cóndor.

Todavía está fresca la sangre derramada.

Todavía se oyen los gritos de las salas de tortura.

Todavía las madres buscan los huesos de los hijos desaparecidos.

Todavía existen más de 400 niños argentinos, robados y desprovistos de su identidad por los sicarios de la ideologia que tiene en Vargas Llosa un propagandista soberbio, burlón y agresivo.

Todavía muchos criminales, sus beneficiarios y mandantes, pasean su impunidad por nuestras calles

No se trata de los innegables méritos literarios. Se trata de la posición ética y moral ante las grandes tragedias de los pueblos en su conjunto y de miles de seres humanos en particular, en este caso en nuestra patria.

Hace poco tiempo La Academia Francesa resolvió rechazar honores académicos a Louis Ferdinand Celine, uno de los mejores, sino el mejor escritor francés del siglo XX.

Esa decisión en un país como Francia, cuna de las libertades y la filosofía política que dieron origen a las actuales democracias, tuvo como fundamento la activa participación de Celine como colaborador del nazismo durante la ocupación Alemana en la Segunda Guerra Mundial, y su proclamado y cruel antisemitismo que le hacía reír cuando, según refieren, algún soldado alemán apaleaba en las calles de París a algún judío.

Knut Hamsun, premio Nóbel 1921 fue severamente sancionado y condenado al ostracismo por haberle regalado a Hitler la medalla del premio. Nada de eso pido para Vargas Llosa.

Solamente reivindico para mí, independientemente de lo que opine la Sra. Presidenta, La Fundación del Libro o el Director de la Biblioteca Nacional, el derecho a ser coherente en la condena a los ideólogos de nuestra tragedia y fiel a la memoria solidaria con el sacrifico de tantos jóvenes, hombres y mujeres, trabajadores y estudiantes, y de centenares de niños desaparecidos. Es una ignominia en estas circunstancias homenajear a un representante y personero de los poderes que generaron tremendas heridas a nuestro país, muy lejos todavía de cicatrizar.

No me cabe duda que no se trata de un error al que no tienen derecho las personas que ocupan cargos importantes en la comisión organizadora.

En estos niveles y circunstancias no existen la inocencia ni la ingenuidad y sí especulaciones políticas inconfesables en un año electoral, que revelan solidaridades inaceptables para cualquiera que por sus convicciones se identifique con la eterna lucha en pos de la libertad y la justicia, por la que perdieron la vida tantas almas nobles y tantos inocentes.

Me despido de Uds., deseándoles sigan teniendo éxito en la empresa que nos hemos propuesto de recuperar a la institución para la convocatoria permanente de las etéreas actividades de la poesía y la escritura.

La nobleza implícita en esta actividad del espíritu y del intelecto, debe estar siempre, sin claudicaciones, como faro que ilumine el camino hacia un mundo más justo y más humano. No se concibe poesía que alabe, tolere, propicie o justifique el crimen, o la esclavitud o el sometimiento de personas o pueblos., y aquel que la cultive, podrá ser el más eximio de los artesanos de la palabra, merecedor del mayor de los premios y reconocimientos académicos, pero portará en su frente el estigma de los grandes traidores de la humanidad, que pusieron sus dones al servicio del Poder económico que gestó y se benefició hasta la actualidad con la tortura, la exclusión y el asesinato de miles de compatriotas.

17 de 2011

Carlos A. Macagno Marzo
Vocal